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··········En una primera lectura, una historia etnográfica, sobre la especialización en –y dependencia de- una actividad económica en la vida de un pueblo, el compatir no sólo los intereses sino la cultura de un conocimiento muy concreto, muy local, muy heredado de tiempos antiguos. Y el contraste con la lógica de las decisiones que debe tomar el Estado, para quien los intereses prioritarios no son los de esa comunidad y menos aún los de sus individuos.
··········Pero también es la historia (seca, apenas dialogada) de dos hermanos, vecinos y peleados desde hace décadas. La tozudez y el orgullo de mantener las posturas, pero el cariño subsistente (sea a el otro, sea al encargo de la madre en su muerte). Unos personajes contados con cariño.
··········La peli se sostiene inicialmente por la curiosidad y por un humor liviano pero continuo. Pero, al igual que sucede con el paisaje conforme se acaba el verano, la historia se va volviendo más emotiva, los actores más expresivos, sin que pierda el tono general de sencillez y calma. Con una catarsis eficazmente simbólica, no sólo en cuanto a la recuperación del amor fraternal, en su función de abrazo y cuidado, sino también en cuanto a que estos hombres, cuando requieren protección (sea la ventisca, sea el virus de las ovejas), se vuelven hacia la naturaleza (protegiéndose del frío en la propia nieve, protegiendo a las mejores cabezas del ganado y confiando en que no se verán afectadas). Recuerda esa imagen del niño que, ante el golpe o la regañina de su padre tiene como impulso aferrarse a él.
··········Enlaces a imdb y filmaffinity.