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··········Festival Internacional de Cine Solidario de Madrid
··········Una chavala de 9 ó 10 años es la que sustenta la película, con naturalidad, energía, capacidad para transmitir estados de ánimo.
··········Es una historia bastante terrible, de familia desestructurada, de droga, embarazos no deseados, alguna mano alzada… Lo que no sé es lo que pinta en un festival de cine solidario. No en el significado habitual de la palabra solidario, más social que individual: en esta historia, las instituciones están desaparecidas, la única que vemos es un colegio y no cruzamos la puerta; no hay una solidaridad pública, pero tampoco ciudadana, de hecho los personajes aparecen casi siempre aislados de sus relaciones sociales. Tampoco en el sentido individual de la palabra: los comportamientos de todos los personajes se rigen por impulsos muy diferentes a la solidaridad, a la empatización con el otro. Aquí todos se mueven por la necesidad de satisfacer necesidades personales o por amores materno filiales (naturales o impostados por una sensación de nido vacío en el personaje de la vecina).
··········Antes de la proyección hablan director y directora y ésta habla de la condición de la mujer, intentando, supongo, encontrar un vínculo (por lo demás poco coherente) con un festival de cine solidario. Tampoco me parece que trate de eso. Prácticamente todos los personajes son mujeres (los únicos dos varones son tipos bastante despreciables pero con poco poder en la historia), y lo que les va mal en la vida no es por su condición de mujer (hay alguna bofetada, pero son mutuas cruzadas; hay embarazos no deseados, pero también abortos y no abortos sin información al progenitor), sino por las decisiones que han ido tomando a lo largo de su vida.
··········Hay más de perspectiva de clase social, de la miseria como un atrapadero, aunque la personaje rica sea un poco caricaturesca.
··········Como historia de personas, es un relato sobre la droga y las irresponsabilidades que genera en su torno. Pero supongo que podría hacérsele una lectura simbólica sobre la historia argentina, al haber una generación que se movió por ilusiones pero que quedó bloqueada por el proceso, otra siguiente anulada, golpeada, que lo único que desea es no hacer esfuerzos (el juego de palabras del título: el doble significado de mantenida como alimentada y cuidada por otros y como puesta en una situación de la que no se le deja salir) y una tercera, la nieta que es la que sufre todo ese pasado y que sólo tiene como armas el impulso natural hacia la acomodación y la supervivencia de los niños y la capacidad de convertirse en objeto de cariño de otros.
··········La veo en un centro oficial. Eso supone que la presentación, aparte de lo poco que dicen los dos directores, incluye un discursito del presidente del organismo. Nada grave, banalidades de quien ni ha visto la peli ni la va a ver; ahora bien, el público es increíble: en una sala pequeña, dos señoras se pasan la película murmurando, un tipo habla por el móvil hasta que decide irse. Y toda la gente que ha ido solo para que la vieran allí va saliendo de la sala en un molesto goteo, a través de una puerta que da pequeños portazos cada vez. ¿Si nos hubieran cobrado la entrada la gente se portaría mejor? Seguramente.